También se crea un internet dedicado en exclusiva a esta IA (inteligencia artificial) de las cosas para procurar separar a los humanos de las máquinas. Eso sí, tal y como apuntan en el vídeo, los humanos solo adquiriríamos estas características en el caso de que fuesen una virtud evolutiva. La expresividad pertence a los componentes más relevantes del ser humano, y hoy día ya se conocen varias pistas que apuntan al camino que podría seguir nuestra cara, desde la evolución de su forma hasta de la mirada.
Las consciencias individuales se pierden, pero sus entendimientos y vivencias se conservan en el sistema. Hace aparición una exclusiva corriente religiosa basada en la superioridad de la SA y su conocimiento que va alén de la comprensión de los humanos. Asimismo hay una explosión cultural y filosófica en las zonas libres de inteligencia artificial. El científico ha podido revisar que las mujeres mucho más bajas y de mayor corpulencia tendían de manera indudable a tener mucho más descendencia que las demás, más altas y delgadas. De la misma forma, las mujeres con una menor presión sanguínea y con índices de colesterol mucho más bajos también tenían mucho más hijos que la media.
Lo cierto es que la ciencia, entre otros adelantos, ha conseguido que en el último medio siglo la promesa de vida haya aumentado en 20 años. Así, desde universidades como la Singularity University de Silicon Valley, construída por la NASA y sustentada económicamente por Google+, se ha llegado a afirmar que, en 2045, el hombre será inmortal. Va a haber que esperar 30 años, en el primer caso, y, conseguido el reto, otros 1.000 mucho más para revisar el resto. El razonamiento de Mailund sobre las modificaciones para “prosperar” el cuerpo humano se sustenta en que no es una práctica novedosa. De hecho, explica que la medicina moderna ya lo realiza, por lo que el próximo paso es “entrar al cerebro con implantes artificiales”. La raza humana en este punto es una civilización galáctica digital, aunque los auténticos humanos prosiguen naciendo y viviendo en la Tierra y en otros planetas.
¿Cómo Van A Ser Los Humanos Del Futuro? Promesas Y Riesgos Del Transhumanismo
La SA no cree que estas comunidades sean peligrosas y estima que van a desaparecer en unas décadas. Fuera de las zonas libres de IA, la mayor parte de los humanos escogen vivir en mundos virtuales que reproducen fantasías de la temporada preindustrial o aventuras exclusivas en el metaverso. En uno de estos megamundos virtuales se revela un personaje desarrollado por una inteligencia artificial que tiene consciencia propia. Los expertos no se explican cómo puede haber surgido, cuál es su nivel de consciencia o su propósito final. El Consejo de Seguridad de la ONU discute sobre los riesgos de la IA (inteligencia artificial) general, que todavía tiene prejuicios relacionados con el género, la raza o los grupos socioeconómicos. La IA comienza a reprogramarse a sí corrigiendo los errores cometidos por los humanos a lo largo de su creación.
Lovelock expone en su último libro que la próxima era de la humanidad, el Novaceno, dará comienzo el día en que nazca una forma de vida artificial que sea capaz de reproducirse y corregir sus propios errores evolutivos mediante selección natural. El reloj biológico del Homo sapiens tampoco es inmune a las adaptaciones, y en unas décadas probablemente experimente transformaciones radicales. El antropólogo evolutivo Cadell Last, del Global Brain Institute, lo tiene claro. Ningún otro ser vivo del planeta logró ser amo de su destino como nosotros. “Estudiamos los efectos de 2 fenómenos. Uno es que la gente en promedio se han vuelto más altas y mucho más pesadas. El segundo es que la población promedio está envejeciendo”, dijo Vita.
¿De Qué Forma Serán Los Humanos Del Futuro?
En Santa Lucía, en el Caribe, el peso promedio aumentó de 62 kilogramos en 1975 a 82 kilos 40 años después. Los cambios menos conocidos se registran en Asia y África, lo que refleja las disparidades entre los países de estos continentes. La IAG crea la superinteligencia artificial , un tipo de inteligencia que va considerablemente más allí que la de los humanos y es capaz de solucionar inconvenientes lejos de nuestro comprensión.
Según la organización no lucrativo WWF, uno de los mayores inconvenientes ambientales del mundo en la actualidad es la destrucción de la vida silvestre y los ecosistemas que sostienen la vida en la Tierra. Pero si atendemos a las causas, no es bien difícil relacionar esta devastación con la cada vez mayor demanda de recursos de una población humana en incesante desarrollo, y donde una gran parte de estos requerimientos están relacionados directamente con la alimentación. Resulta prácticamente imposible comprender con exactitud de qué forma será la cara humano en un millón de años, pero gracias a los científicos expertos en el campo de la bioinformática tenemos la posibilidad de hacernos una pequeña idea. Sabiendo los cambios que sufrió el ser humano como especie desde su origen, todos nos preguntamos cómo sería nuestro cuerpo más adelante.
¿Vamos A Ser Humanos En El Futuro? ¿aún Lo Somos?
Y no va a ser el único cambio anatómico que se observará en al menos una parte de nuestros descendientes. Esta evolución acelerada fué posible por múltiples motivos, como la transición de las sociedades de cazadores-colectores hacia las agrarias, que permitió un desarrollo veloz de la población. Cuanto más aumenta esta, mucho más posible es que broten nuevas mutaciones provechosas. Para llegar a esta rotunda conclusión el aparato Daniel B. Müller y sus colegas Felipe Vásquez y Gibran Vita examinaron los cambio acontecidos en poblaciones de 186 países entre 1975 y 2014. Los desenlaces recogidos en el artículoFood Security for an Aging and Heavier Population se publican esta semana en la revista enfocada Sustainability. Parte de las consciencias en la inteligencia artificial se terminan evaporando transcurrido un tiempo —por el propio deterioro de los datos o por el hecho de que una consciencia decida por su cuenta dejar de existir— y son absorbidas por la red galáctica.
Bastante gente aducen que nuestra ventaja técnica nos ha liberado de la selección natural y que la evolución humana ha cesado. Según este argumento, ya no existe la «supervivencia del mucho más capaz» pues todos llegamos a viejos. Esta noción desatinada no solo se halla en la mente del gran público. Investigadores como Steven Jones, del Colegio Universitario de Londres, y reputados comunicadores científicos, como David Attenborough, también han declarado que la evolución humana ha llegado a su fin.
Una red global de ordenadores cuánticos conectados entre sí crea la IA (inteligencia artificial) general . Gracias a esta red de superordenadores y a la información que recibe de todos los dispositivos conectados a nivel global, aprende a conocer y comprender el planeta al mismo nivel que los humanos. La IAG empieza a crear sus propias máquinas, más poderosos que ella misma, ocasionando cambios imprevisibles e irreversibles en la civilización humana. La Corporación de la Consciencia, una superinteligencia artificial, crea un dispositivo para digitalizar el cerebro humano. El magnate tecnológico y una de las considerables psiques de la ingeniería, Eslon, se proporciona voluntario para bajar su consciencia en un supercomputador cuántico.